jueves, 15 de julio de 2010

XII Marxa al Bartolo


Después de que mi compi Ramone estuviese dándome la brasa una buena temporada, decidí apuntarme a la XII Marxa al Bartolo con él. (Ya sabeis, siempre hay que hacer caso a los mayores)
Así que el domingo disputé mi primera carrera de montaña, una carrera de 24km en Benicàssim…¿quién me iba a decir a mí hace pocos meses que haría una prueba así? ¡Lo hubiera tachado de loco!
Últimamente mis ¿escasos? entrenamientos han sido más por montaña. He estado subiendo de forma asidua a la Creu del Cardenal (La Murta). Como las horas de que dispongo para entrenar son las de mediodía, os podéis imaginar el calorcillo que puede hacer a las 14h. Esto lo digo porque a pesar de no estar preparada (o creerlo, por lo menos) para tanta distancia, sí lo estaba para soportar el calor que hiciese ese día.
El sábado por la tarde fuí con Ramone a recoger los dorsales. Éramos alrededor de 480 inscritos y yo tenía el dorsal 22. Es un número que me gusta mucho y además me daba buen rollo.

A la mañana siguiente, hacia las 6:45 estábamos en la salida, después de levantarnos antes de las 5 para desayunar. No íbamos en plan de correr mucho, sólo de caminar y trotar por donde se pudiese, y así lo hicimos.
Mi intención, en un principio, era terminarla dentro de las 6h de margen que daba la organización, pero una vez empezada la carrera y pasados al menos 8kms., el objetivo era diferente. Estaba convencida que terminaría la carrera, pero ahora quería hacerlo en el mínimo tiempo posible.


Los avituallamientos eran muy completos. Había naranja, plátano, longaniza de pascua y unos dulces que estaban buenísimos. También había aquarius (naranja y limón) y agua.


En general, la subida hasta el Bartolo no se hizo muy pesada. Y una vez lo pasamos, había unos 5 km de bajada que los hicimos corriendo.
Cerca del km 17, pasamos por una fuente en la que nos refrescamos (Font Tallà) y llenamos los bidones, sin saber que a escasos metros teníamos otro avituallamiento. En este punto nos adelantó mucha gente (a la que curiosamente perdimos de vista) pero mereció la pena porque el agua estaba fresquísima
Hasta aquí todo fué genial pero a partir del 18 se complicó. Había una nueva subida al Molló Agülles, que se me hizo bastante dura. Encima el soletón empezaba a apretar y un ratito después, ya de bajada, las piernas y el cerebro iban cada uno por su cuenta. Llegó un momento en el que resbalé y caí. Me daba rabia porque había ido todo el camino muy bien y ahora, con el cansancio, no coordinaba bien mis movimientos.
Algo curioso que nos sucedió por este tramo es que mirábamos hacia atrás y no veíamos a nadie, pensando que eramos de los últimos, y a falta de 3km empezaron a adelantarnos un montón de gente, que curiosamente parecía que no estuviesen tan cansados. Después escuchamos que un grupo de gente se había perdido y los trasladaron (cómodamente) a otro punto del camino.
Los 2 últimos kms fueron completamente llanos pero ya no tenía fuerzas y mi entrada en meta fué más lenta de lo que hubiese querido.
Acabamos la carrera en 4:47:44 Estaba encantada; por la marca, porque disfruté un montón y sobretodo, por la compañía.

Así que, quiero agradecer enormemente la ayuda de Ramone, que ha estado apoyándome en todo momento y que si no hubiese sido por él, no lo hubiese conseguido. Me ha ayudado a demostrarme de nuevo a mi misma que si quiero, PUEDO.
Este es el track según el reloj de Ramone.
AQUÍ os dejo el resto de las fotos. Espero que las disfruteis
P.D. Comunicado oficial para Moja: “¡¡ERES UN AUTÉNTICO CABRONCETE!!